Novena!

Novena a la Virgen de Guadalupe | 3º Día

Oración Inicial para todos los días 

“Señor mío, Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Creador y Redentor mío, por ser vos quien sois, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido. Propongo  enmendarme y confesarme a su tiempo y ofrezco cuanto hiciere en satisfacción de mis pecados, y  confío por vuestra bondad y misericordia infinita, que me perdonaréis y me daréis gracia para  nunca más pecar. Así lo espero por intercesión de mi Madre, nuestra Señora la Virgen de  Guadalupe. Amén. “

Novena a la Virgen de Guadalupe | 3º Día

Oración Inicial…

Tercer día
¡Oh Santísima Virgen María de Guadalupe! ¡Qué puedo creer al verte cercada  de los rayos del sol, sino que estás íntimamente unida al Sol de la Divinidad,  que no hay en tu casa ninguna cosa que no sea luz, que no sea gracia y que no  sea santidad!  ¡Qué puedo creer sino que estás anegada en el piélago de las divinas  perfecciones y atributos, y que Dios te tiene siempre en su Corazón! Sea para  bien, Señora, tan alta felicidad. Yo, entre tanto, arrebatado del gozo que ello me causa, me presento delante  del trono de tu soberanía, suplicándote te dignes enviar uno de tus ardientes  rayos hacia mi corazón: ilumina con su luz mi entendimiento; enciende con su  luz mi voluntad; haz que acabe yo de persuadirme de que vivo engañado todo  el tiempo que no empleo en amarte ti y en amar a mi Dios: haz que acabe de  persuadirme que me engaño miserablemente cuando amo alguna cosa que no  sea mi Dios y cuando no te amo a Ti por Dios. ¡Amén! 

Reza un Padrenuestro, un Ave María y un Gloria:

Padre Nuestro:

Padre nuestros que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el Cielo.

Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. ¡Amén!

Ave María:

Dios te salve María llena eres de gracia el Señor es contigo; bendita tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la ahora de nuestra muerte. ¡Amén! 

Gloria: 

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. ¡Amén!

¡Virgen de Guadalupe, ruega por nosotros! Padre, Hijo y Espíritu Santo. ¡Amén!

Leia mais:
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.:3º dia da Novena a Nossa Senhora Aparecida
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Reze conosco em português

Oração inicial para todos os dias

“Senhor meu, Jesus Cristo, Deus e Homem verdadeiro, Criador e Redentor meu! Por serdes Vós quem sois, e porque Vos amo sobre todas as coisas, pesa-me, de todo coração, por vos ter ofendido. Mas proponho firmemente, ajudado com o auxílio de Vossa divina graça, emendar-me e nunca mais Vos tornar a ofender. E espero, com Vossa confiança, bondade e pela Vossa infinita misericórdia, alcançar o perdão e nunca mais pecar. Assim espero por intercessão da minha Mãe, Nossa Senhora a Virgem de Guadalupe. Amém!”

Começar com a oração inicial de todos os dias

Oh! Santíssima Virgem Maria de Guadalupe! O que posso crer ao ver-vos cercada pelos raios do sol, senão que estás intimamente unida ao sol da divindade, que não há em vós coisa alguma que não seja luz, que não seja graça e que não seja santidade! O que posso crer senão que estás imersa no mar de perfeições e dons divinos, e que Deus vos tem sempre em Seu coração! Seja para nosso bem, Senhora, tão imensa felicidade. Eu, entretanto, arrebatado pela alegria que isso me causa, apresento-se diante de vosso trono, suplicando que vos dignes enviar um de vossos ardentes raios até meu coração; ilumina com sua luz meu entendimento, acende com sua luz minha vontade; fazei que eu acabe por persuadir-me de que vivo enganado todo o tempo em que não me empenho em amar-vos, minha querida mãe, e a vossos filhos como meus irmãos e em amar a meu Deus sobre todas as coisas. Fazei que eu acabe por me persuadir de que me engano miseravelmente quando amo as criaturas mais que a meu Deus, e quando não demonstro por minhas obras esse amor, vos amando e ao meu próximo. Amém!

Um Pai-nosso, Ave-Maria, Glória.